No para la polémica por aprobación del Marco Legal para la Paz

El debate sobre el Marco Jco para Impunidad d crímenes lesa humanidad no terminó con su aprobación. Apenas comienza! RG

Jorge Iván Posada | Medellín | Publicado el 15 de junio de 2012

Un día después de ser aprobado el Marco Legal para la Paz, no paran las opiniones en contra de esta ley de justicia transicional que servirá, a futuro, en un proceso de negociación con las guerrillas.

Muy temprano Rafael Guarín, exviceministro de Defensa, expresó en su cuenta de Twitter @RafaGuarin: “Cuando Estado renuncia a someter a ley a delincuentes acaba con base del Estado de derecho y legítima el crimen como medio de acción política”.

¿MARCO PARA NARCOS?

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Lo invito a que debatamos en twitter @RafaGuarin

Publicado en El Nuevo Herald de Miami y en www.libretadeapuntes.com 13 de junio de 2012 

RAFAEL GUARÍN

El Congreso de Colombia debatió esta semana la aprobación del “Marco Jurídico para la Paz”. Se trata de una reforma a la Constitución que pretende ser la base de mecanismos de justicia transicional que sirvan para conseguir el final del “conflicto”, mediante un "Acuerdo de Paz". A pesar de las reiteradas críticas y de que sus promotores insisten que hicieron correcciones, la verdad es que la iniciativa se convirtió en un auténtico bacanal de impunidad para perpetradores de crímenes atroces, sean de guerrillas, AUC o miembros de la fuerza pública.

LA CONSTITUCIÓN CONTRA LA CONSTITUCIÓN

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             Atentado de FARC en Tumaco, departamento de Nariño, Colombia. 3 de febrero de 2012

Publicado en www.libretadeapuntes.com
10 de junio de 2012

RAFAEL GUARÍN

¿Se imagina que en Camboya se quisiera reformar la Constitución para impedir a los jueces perseguir a quienes participaron en los crímenes de lesa humanidad que hicieron parte de un genocidio en el que murieron más de un 1.500.000, lo que supone la desaparición del 20% del total de la población? Imagine que los promotores de esa reforma pretendan que la justicia internacional no procese a los perpetradores de los Jemeres Rojos, excusándose en un “Acuerdo de Paz”.