martes, octubre 06, 2009

LOS MITOS DEL TERRORISMO


Especial para Facebook
RAFAEL GUARÍN

Justificar su existencia y la decisión de optar por la violencia es indispensable para los grupos terroristas. Tales organizaciones saben que la violencia no es suficiente para cumplir su objetivo y de la necesidad de combinarla con otros instrumentos y medios que permitan la movilización ciudadana a su favor.

La revolución sobreviene, siguiendo a Von der Heydte, cuando la fórmula en que se sustenta un orden político pierde vigencia, esto es, que agota su legitimidad y es reemplazada por una nueva, la que proponen los terroristas. Por esa razón, el cumplimiento del objetivo político implica instalar esa nueva fórmula, lo cual se alcanza si ésta obtiene legitimidad, es decir, si consigue coincidir con los valores y las ideas imperantes en la sociedad.

Para lograrlo, los terroristas deben ofrecer a los ciudadanos una lectura de la historia que justifique su actividad y propósitos. La manera en que se relatan los acontecimientos, se adjudican responsabilidades, se exaltan o condenan individuos o grupos y se explica el presente, resulta decisiva en la posibilidad de que el proyecto impulsado por los terroristas gane la legitimidad necesaria para imponerse.

Por esa razón, una de las tareas permanentes es la creación de mitos legitimadores. Se trata de convertir ciertos acontecimientos en hechos que permiten explicar el presente y justificar conductas futuras. Más que el hecho en sí, lo importante es el significado y alcance que se le otorgue, al igual que lograr que sea interiorizado por el colectivo del cual se busca obtener apoyo. Esto explica que las organizaciones terroristas insistan hasta la saciedad en las supuestas “causas del conflicto” y que cada de una de sus operaciones se cubra con idéntico manto discursivo.

En ese contexto, se entiende por mito una historia ficticia construida sobre sucesos reales cuya narración e interpretación obedece a determinados intereses políticos y visión de la sociedad. Los mitos políticos determinan la acción política, pues al ser aceptados por la sociedad se convierten en condicionante de sus actitudes y conductas.

Tal y como lo describe Ernst Cassirer en “El Mito del Estado”, los “nuevos mitos políticos no surgen libremente”. “Son cosas artificiales, fabricadas por artífices muy expertos y habilidosos”. Dicha característica es clave a la hora de interpretar el papel de los mitos en el terrorismo y su utilización por parte de los agentes políticos. El profesor Antonio Elorza tiene razón al afirmar que la “historia no hace el mito; es el mito el que se convierte en historia”.

Los mitos enmarcan los enfoques, fijan las percepciones de los involucrados, son imprescindibles en la adhesión popular que buscan los grupos terroristas y en el reclutamiento de nuevos integrantes. Tienen también que ver con la decisión de mantener la violencia y constituyen un elemento de cohesión interna. Un aparato armado que impugna el orden político debe contar con un discurso en que los mitos se repiten y se extienden, al tiempo que proporcionan una explicación a su existencia y una justificación para sus miembros. En virtud del mito se avala el asesinato, los carros bombas, el secuestro y, en general, el empleo de todo tipo de acciones terroristas. El mito permite además descargar la responsabilidad de los propios crímenes en el enemigo o en la sociedad, nunca en la organización terrorista.

Al examinar los casos de Irlanda del Norte con IRA y del País Vasco con ETA se ratifica la forma en que los mitos y la manipulación de la historia se vinculan íntimamente a la existencia y actuación de los grupos terroristas.

Las FARC son muy diestras en el manejo del mito. Antes de su fundación oficial y con el surgimiento de las primeras guerrillas comunistas, en los años cincuenta, una de las principales tareas ha sido la de escribir una narrativa que justifique la violencia. Son muchos los ejemplos que se pueden citar, pero dejémoslos para la siguiente columna, por lo pronto, subrayemos que una línea de acción antiterrorista es la de desmitificar aquellos acontecimientos que sirven de sustento al discurso de las agrupaciones violentas presentándolos en su real dimensión.

www.rafaelguarin.blogspot.com

3 comentarios:

  1. Mito? He aquí un mito: un joven trabajador palestino se dirige a su casa luego de un duro dia de trabajo para una empresa israelí que explota el gas natural hallado en aguas territoriales palestinas, pero OBSEQUIADAS por el gobierno titere palestino a Israel. No bien se acerca a su barrio se da cuenta que este ya no existe. Solo se aprecian unos bulldozer cat. De repente observa a su madre llorando sobre las ruinas de lo que debió ser su casa. La han golpeado los soldados israelíes y se han llevado uno de sus hijos preso. A partir de ese momento, se comienza la construcción de asentamientos judíos. El joven palestino decide recurrir a sus autoridades, pero recuerda que no tienen. Ni siquiera se les permite tener un ejército regular que los defienda. Peor aún. A los invasores que otrora los protegiera Dios mismo ayudando a masacrar a sus antepasados -Philisteos de la Philistina, Palestina- ahora los protege un ente acaso más poderoso que Dios mismo, USA. El jóven decide unirse a las filas de Hamas, lo más parecido a una organización real, civil y militar dentro de Palestina. El señor Guarín desde su cómoda posición no entiende esas cosas. Un mito. Lo que no es un mito es simpatizar con el terrorista uribe.

    ResponderBorrar
  2. uribe luchador por la paz? Me parece que alguien que genera pobreza, desplazamiento, redistribución inequitativa de la tierra, desempleo, y una corrupción sin parangón. Y en un gobierno que entre ejército y policía se han asesinado más colombianos que las propias Farc, está lejos de ser un luchador de paz.

    ResponderBorrar
  3. No ven que andamos es en clases de mitología y no de historia!!!

    Incoherente la foto con el texto... las FARC no volaron las torres gemelas... fue Washington y su negligencia...

    Utiliza usted un lenguaje que se sale de la realidad pretendiendo hacer poesía del delito...

    IRA y ETA... NO TIENEN NADA que ver con los metodos de las FARC...

    Solo son socios... como la mafia Rusa, la Italiana y la COlombiana...

    por Dios...

    Carros bomba y demas, son cosas del pasado... hace cuánto no estalla uno en Colombia??

    se le olvido crear el mito de las FARC y el Atentado al Nogal, para compararlas con la Inexistente Al Qaeda que ese SÌ es un mito de Washington...

    ...en Afgasnitan, nadie esta combatiendo a Al Qaeda sino a los talibanes... entre notas le recuerdo!

    ResponderBorrar