El gobierno de los Estados Unidos ha sido claro: Trinidad ha cometido crímenes y se quedará en la cárcel. La maniobra, repetición de la que llevó al criminal Rodrigo Granda a la calle, quedó frustrada.
Con la excusa de la paz o en su nombre no se puede liberar criminales y consagrar impunidad para quienes como Trinidad tienen enorme responsabilidad en el asesinato, el narcotráfico, el secuestro, la extorsión y el desconocimiento de los derechos de los colombianos.
El camino a la paz no es la impunidad. Está es origen de nuevos procesos de violencia y de estímulo al crimen.
La paz no puede ser a cualquier precio. Requiere justicia y respeto a los derechos de las víctimas.
Sería una absurda ingenuidad liberar a Simón Trinidad en nombre de una paz que hasta ahora sólo está en la vieja retórica fariana.
Por lo pronto, no sólo quedan frustrados los integrantes del Secretariado, sino el alcalde Gustavo Petro que se había sumado a esa petición.
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El periódico El Tiempo informó:
La guerrilla pide que sea indultado para que integre la mesa de diálogos de paz.La negativa a que el dirigente de las Farc sea entregado la anunció el propio Gobierno de Estados Unidos.
"Simón Trinidad cometió crímenes y va a seguir encarcelado", aseguró el subsecretario de Asuntos Públicos del Departamento de Estado, Mike Hammer, en una rueda de prensa.
Las Farc han pedido al presidente estadounidense, Barack Obama, que indulte a Trinidad, quien fue extraditado en 2004 por el Gobierno colombiano a Estados Unidos, donde fue condenado a 60 años de cárcel por el secuestro de tres estadounidenses, quienes fueron posteriormente liberados en 2008 junto a la excandidata presidencial Ingrid Betancourt.
Estados Unidos no es "parte del proceso de paz de Colombia, aunque desde luego apoyamos los esfuerzos del presidente Santos, porque creemos que es sumamente importante que el pueblo colombiano por fin pueda vivir en paz y tranquilidad", agregó Hammer.
WASHINGTON
AFP
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