lunes, marzo 25, 2013

¿Por qué le molesta tanto a Santos y a su corte la verdad?

Otra vez el gobierno acude a la mano negra
 
El estilo del gobierno Santos se impone. Ahora a quien más se la jugó por la paz, hasta con terquedad y torpeza muchas veces, el expresidente conservador Andrés Pastrana, es objeto de todo tipo de ataques por parte del ministro de interior Fernando Carrillo.

 Carrillo salió a etiquetar a Pastrana como "guerrerista", es decir, en el lenguaje de la élite santista esto se traduce en "enemigo de la paz" y en "mano negra", los calificativos destinados a criminalizar a todo aquel que piense distinto al gobierno en materia de proceso de paz y de la situación de seguridad.

Ni siquiera las FARC han llegado a tanto. Hasta el momento de escribir este comentario el grupo terrorista no ha reaccionado a las observaciones que dio el dirigente conservador en una entrevista concedida al diario El Espectador. Seguramente, seguirán la linea que les tiró el gobierno Santos y repetirán, con la carga de amenaza que conlleva, el calificativo de Carrillo.

Muy complicado ejercer los derechos políticos y la libertad de opinión en un país en donde desde las cumbres del ejecutivo y desde los campamentos terroristas se conciertan para descalificar a quienes no comparten lo que está pasando en La Habana. En ese escenario de la palabra al atentado personal hay sólo un paso.

Tiene razón Pastrana en reclamar unidad alrededor del proceso y transparencia en lo que se está discutiendo. Tiene razón en decir que el país está dividio o ¿es que en la Casa de Nariño no leen i no saben leer las encuestas?

Tiene razón en señalar que Santos no recibió un mandato para la paz, como sí lo tuvo él. No es cuestión de artículos constitucionales como señala Carrillo. !No es una cosa jurídica, respetado ministro, es un asunto político!

Santos fue elegido para continuar la Política de Seguridad Democrática, no para repudiarla y sustituirla por una que legitima el crimen de lesa humanidad, como medio de acción política en una democracia y reforma la constitución para dar garantía de impunidad a las FARC por sus crímenes atroces pasados, presentes y futuros.

El Presidente sufre en las encuestas esa deslealtad con sus electores. La paz será únicamente una maniobra de propaganda, efervecencia momentánea y discurso político si se hace sobre la base de impunidad. En eso también tiene razón Pastrana: La Corte Penal Internacional entrará actuar si no hay justicia en Colombia.

¿Por qué se molesta tanto Santos y su corte cuando les dicen la verdad?

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