FUNDADOR DE UP CONFIRMA QUE ÉSTA ERA BRAZO POLÍTICO DE FARC

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LA SILLA VACIA entrevistó a Boris Cabrera, uno de los fundadores de la Unión Patriótica, organizador de movilizaciones campesinas cocaleras en los años 80 y conocedor de las FARC. Fundó la UP en el Caquetá junto a Iván Márquez.


Interesante que como fundador de la UP, Boris Cabrera reconoce que se trataba de una organización ideada y creada por las FARC:



"La UP fue una creación directamente de las Farc", afirma.

También que el Partido Comunista, el mismo que fundó a las FARC y propagó la guerra de guerrilla era central en la UP:

"A la UP confluyó el Partido Comunista, otra serie de organizaciones"

Y, finalmente, termina por admitir, sin decirlo, que la Unión Patriótica era el brazo político de las FARC. Una frase que genera avalanchas de críticas y descalificaciones contra quienes se atreven a pronunciarla. Según Boris:

"nunca se escondió que el primer candidato presidencial fue Jacobo Arenas. Braulio Herrera era el secretario ejecutivo. E Iván Márquez fue uno de los parlamentarios".

Arenas y Marulanda concibieron la UP dentro de la combinación de todas las formas de lucha

Lo que impidió que Arenas fuera el candidato en 1986 fue la toma del Palacio de Justicia en noviembre de 1985 y los efectos que produjo. Para ese mes Arenas había organizado el lanzamiento de la UP, no como una organización desprendida de la violencia, sino como expresión de la combinación de todas las formas de lucha que teorizó el secretario general del Partido Comunista, Gilberto Viera.

Ahora, cuando se comienza a hablar del "genocidio" de la UP, se olvida que las UP eran las FARC, aclarando que si bien no todos sus miembros integraban el grupo criminal, sí su cúpula, ideario, conducción y principales cuadros.

Esa realidad la ocultan las FARC y amplios sectores de izquierda. Olvidan que la UP fue concebida por el Secretariado como herramienta de guerra revolucionaria, no medio hacia la paz. Como medio para escalar la violencia y la movilización en el marco del plan estratégico para la toma del poder, adoptado en 1982. Nunca como el paso a la lucha democrática junto a la necesaria desmovilización del aparato armado.

Por supuesto, nada justificaba la matanza de sus miembros. Un Estado fuerte debia haberlos judicializado, no permitido su asesinato.

Este debate está pendiente. Y si de verdades se trata, que bueno que además de que se revele quiénes de la clase política y empresarial, así como de la élite colombiana estuvieron involucrados con las AUC, de la misma manera se descubra la cara de la farcpolítica y del empleo de los mecanismos democráticos en el marco de la guerra irregular que adelanta las FARC. Eso sí, seguramente, no generará entrevistas, reportajes ni escritos.

Recomendamos la entrevista . Es útil para apreciar el punto de vista de un sector de la sociedad colombiana que ha vivido la confrontación violenta y analiza el proceso de paz desde cierta óptica de la izquierda.